El otoño ya está aquí, y ahora mismo le acompañará el invierno, lo que supone que el frío, las lluvias y las tormentas volverán a estar a la orden del día. Esto también supone que llega el momento de preparar nuestro hogar para la llegada de la época más fría del año, y es que, no hay ningún otro sitio como tu casa para pasar un tarde de frío y lluvia.
¿A quién no le gusta pasar una tarde entera dentro de la cama mientras disfrutas de la calidez de tus sábanas y el entretenimiento de alguna película interesante?
Por ello preparar el dormitorio a conciencia para el invierno se vuelve fundamental e indispensable, siempre que no quieras tener que estar tiritando y tener que gastar una auténtica fortuna en calefacción. Aunque cuando hablamos de preparar el hogar, realmente nos referimos principalmente a preparar la cama, que es dónde más sufrimos los efectos del frío y del invierno.
¿Cómo preparar la cama para el invierno?
Si ya notas como las noches son cada vez más frías y todavía no has cambiado las sábanas que utilizabas en verano, estarás pasando un frío totalmente innecesario. Deja la pereza a un lado y prepara cuanto antes tu cama para la llegada del invierno.
Algunos de los artículos que no pueden faltar si quieres disfrutar de la mayor calidez y olvidarte del frío definitivamente, son los nórdicos con sus correspondientes fundas nórdicas, las mantas invernales y si es necesario, una manta o una colcha para garantizar todavía más que no vas a pasar ni pizca de frío.
Tipos de sábanas de invierno
Mención especial requieren las sábanas de invierno, mucho más importantes de lo que puedas imaginar y las principales culpables de que pases frío, o las heroínas que te permitirán sentirte lo más a gusto posible. Existe una gran variedad de sábanas de invierno entre las que elegir, aunque nosotros sin duda apostamos por las sábanas de pirineo como primera opción.
Se trata de unas sábanas modernas que te asegurarán que no vas a estar en ningún sitio tan calentito como en tu cama. Suelen estar diseñadas con un 100% de poliéster, por lo que la comodidad y la suavidad mientras duermes está más que asegurada. Destacan por tener una calidad superior al resto, que hará que sean mucho más duraderas que cualquier otra sábana que hayas utilizado anteriormente. Estarán como nuevas después de cada lavado y apenas notarás ningún tipo de desgaste.
Si odias el frío y no quieres ni verlo cuando estés en casa, no dudes en hacerte con unas sábanas de pirineo. Pero cuidado, ya que no querrás salir de la cama.
Otras de las sábanas más utilizadas durante los meses de invierno son las sábanas de franela y las sábanas de coralina, que aún siendo una buena opción, quedan algo lejos de las sábanas de pirineo. Las primeras son conocidas por todos, ya que se han utilizado desde que tienes uso de razón y son una apuesta segura. Fabricadas en algodón garantizan la calidez, el problema es que después de cada lavado tendrás la sensación de que calientan un poco menos. Es habitual la pérdida de algodón en este tipo de sábanas, por lo que mucha gente termina por apostar por otro tipo de sábanas.
Por otro lado están las sábanas de coralina, que se asemejan más a las de pirineo. Están fabricadas al 100% en microfibra de poliéster, por lo que ofrecen una suavidad espectacular. Su mantenimiento también es superior al de las sábanas de franela, aunque no llega a ser como el de las de pirineo.